Paño de lágrimas {Alice} ~

No podía evitar pensar que a su amiga le estaba pasando algo, y algo grave. Había notado que no era la misma, esa chica divertida y bromista, estaba como más apagada y eso le molestaba, le intrigaba. Pero ella tampoco estaba muy bien que digamos, también estaba como ida, sus profesores le habían dicho que estaba como distraída en clases y ella lo sabía.

Se refugió en el baño de chicas, echándose un poco de agua en la cara.

Rondaba por el cuarto piso caminando con desgana. Lo odiaba, odiaba estos estupidos retos solo me estaban afectando mas de lo que ya me afectaban. Sabia que Lily estaba igual, era mirarla y lo sabia.
Entre al baño para refrescarme cuando vi a Lily.
- Hola Lils- la saludé sonriendo leve, sin ganas.

Se giró sobre sí misma, observando a su amiga en la entrada. No pudo sonreír, no tenía ganas para hacerlo y pudo notar en la de Alice que ella tampoco tenía ganas de hacerlo, era como forzada.
-Hola -murmuró.

No aguante mas verla a si y tampoco ver mi destrozado reflejo en el espejo y corri a ella y la abraze fuerte, la necesitaba, necesitaba un abrazo de mi mejor amiga.

La recibió con los brazos abiertos, mientras acariciaba su castaño cabello, disfrutando de ese abrazo como nunca. Necesitaba a Alice, así como ella la necesitaba. Se necesitaban, pues ninguna de las dos estaba pasando por un buen momento.

- Ay Lily, ¿que hemos echo? ¿Estamos mal por esos idiotas? Si me hubiera pasado esto el año pasado o unos meses atras me reia hasta morirme- dije aun abrazandola.

-No deberíamos estar así, ellos no lo merecen Alice. Son unos arrogantes insensibles, saben lo que nos costó hacer eso ¿y qué hicieron? Burlarse, no lo merecen Alice, no deberíamos estar así -murmuró, acariciando su espalda.

Asenti y me separe un poco para mirarla, no podia evitar tener los ojos aguados por contener las lagrimas que querian salir pero yo no queria.
- Lo se, son los idiotas mas grandes del universo. ¿Pero entonces porque estamos asi? No nos deberia afectar pero nos afecta- expliqué apenada y molesta.

-A veces nos creamos cuentos, pensando que con eso ellos cambiarían, serían buenas personas, pero ahora no nos ven como unas imposibles, ya tuvieron lo que querían de nosotras -murmuraba, sintiendo como sus ojos se aguaban y sus mejillas eran mojadas por sus lágrimas.

Asenti ya llorando ya.
- ¡Exacto! ¡Los odio! Ya tuvieron lo que quisieron entonces nos dejan asi humilladas. ¡Los odio Lily, los odio!- dije molesta.

-No, odias a Sirius. Potter es tu amigo, ¿no? -murmuró, sintiendo una pequeña punzada en su interior al nombrarlos.

Hice una mueca a esuchar el nombre de Black.
- A Black lo odio y James...tambien. Puede ser todo el amigo que quiera pero hacerle eso a mi mejor amiga no lo permitire- dije segura.

-Debí suponer que reaccionaría así. Ya me tenía en bandeja de plata, ¿para qué seguir siendo amable con la estúpida Evans? -la voz se le quebró al decir esas palabras, mientras sus mejillas eran inundabas por las lágrimas, lágrimas que se había negado a derramar, hasta ahora.

- Oh Lily, no digas eso...yo, dios es mi culpa. Yo te anime a que lo hagas, en verdad pense que le importabas. Lo siento mucho- dije alejandome de ella mientras lloraba, me sentia muy culpable.

-A ese no le importa nadie Alice, nadie -murmuró, abrazándose de nuevo a su amiga.

Me refugie en sus brazos llorando.
- Lo siento Lily, me di cuenta tarde- dije.

-Yo también Alice, siento lo de Black. Debí intuir que eran tan malos e insensibles. Lo siento -musitó, sintiendose tremendamente culpable.

Negué.
- Dejemos de culparnos. La unica culpa lo tienen esos idiotas- dije molesta.

-Te juro que pensé que Potter había cambiado... Incluso ya no se mete mucho con Severus... Y resulta que es el mismo de siempre -murmuró.

Asenti y golpee la pared con mi puño, no muy fuerte pero aun asi me dolio y no me queje.
- ¡Ninguno de los dos cambio! ¡Ninguno!- dije enojada.

-Jamás lo harán -musitó, observando como su amiga golpeaba la pared.

Sentia el puño que me dolia mucho, se me estaba hinchando pero no me importo me deje caer en el piso derrotada.

-Alice, por favor, no te hagas más daño -murmuró arrodillándose al lado de ella.

- Es que es la unica manera para que no mate a nadie. Estoy herida, molesta y myu enojada, pero admito que mas herida y humillada- dije.

-No eres la única cariño, no lo eres -murmuró, acariciando su cabello, intentando calmarla.