En la guarida del lobo

No podía, toda ella me sacaba por completo de mis cabales. Su voz, sus ojos, sus labios, su cuerpo. A duras penas, porque mi respiración estaba completamente fuera de ritmo, deslicé mi boca con lentitud rumbo a sus pechos, obligandome a mi mismo a delirar por mi afan de no soltarle las manos

Me arquie sintiendolo ahi y aprete sus manos mas fuerte, no podia hacer nada como el me tenia estaba a su merced, y la verdad no me quejaba en lo absoluto, movi mis caderas, aun con mis piernas en su cintura, haciendo un contacto demasiado intimo, para que continuara jadeando.

Jadeé y gemí fuertemente ante su contacto. Mordisqueé con delicadeza y sin lastimar su pecho desnudo, mientras acercaba mi cadera a la suya, rozando lentamente su sexo con el mío lentamente

Mi respiracion termino de desbocarse, sentirlo en mis senos y en mi sexo, cerre los ojos, temblando de placer.

Sin poder resistirlo mas, volví a colocarme en su entrada con un movimiento de cadera. Dejé sus pechos un momento para volver a subir a sus labios, me detuve para rozar sus labios

-Te amo...me desquicias los sentidos...- susurré acaloradamente antes de besarla

Movi mis caderas levemente cuando lo senti en mi entrada, disfrutando de ese contacto al maximo, sabia que ahora disfrutaria sin dolor alguno, me arquie y sonrei al escucharlo, atrape sus labios y me aferre a el con mis piernas.

Me fui deslizando dentro de ella, apretando sus manos entre las mías mientras la besaba con desesperación. Los espasmos en mi espalda me hacían estremecerme ante el contacto

El beso se volvio cada vez mas apasionado, mientras el entraba en mi, de nuevo era suya y solo de el.

Cuando estuve completamente dentro de ella me estremecí otro poco y jadeé en sus labios. La amaba con locura y desesperación, esa era la realidad. Comencé a mover mi cadera lentamente, buscando enloquecernos a ambos

Abri mis ojos, no podia perderme de ver su rostro de placer, mis labios se presionaban a los suyos de una forma candente y completamente demandante, mis caderas las movi para poder ayudarle un poco, lo unico que podia hacer debido a que el seguia tomando mis manos, las aprete con fuerza y pude sentir las cadenas en su mano, sonrei, no las habia soltado ni un minuto.

Me separé levemente de sus labios para soltar un pequeño gruñido de placer antes de comenzar a mover mis caderas mas rápido. De nuevo comenzaba a cubrirme de una capa delgada de sudor

Lo observaba con cuidado, cada gesto de placer, unicamente mio, jadie despacio y me movi levemente para empezar a besar su cuello, delirando debido a sus embestidas.

Otro gruñido se escapo de mi garganta cuando sus labios entraron en contacto con la piel de mi cuello, la sensible piel de mi cuello. Moví la cabeza para darle mas acceso mientras continuaba embistiendo, cada vez con mas fuerza

Rechine mis dientes y mordi levemente su cuello, estremeciendome, era delicioso, no habia dolor solo el placer que el me provocaba, el amor que me demostraba, lami donde le mordi y continue dejando besitos, cortos, humedos.

Seguí empujando a ritmo acelerado, perdiendo con mucho mi razón, mi cabeza, mis brazos...Ya no sentía nada mas que el amor que le tenía y el placer que sentía en esos momentos

-Ahh...-gemí entrecortadamente en su oído

Necesitaba abrazarlo, pero al no poder continue besandolo, moviendo mis caderas al ritmo que el marcaba, gruñi de placer y podia sentir como de nuevo me llevaba a ese esquisito orgasmo, heche la cabeza hacia atras.

De nuevo comencé a sentir la sensación de como me apretaba. Solté un grito ahogado y me moví, si era posible, mas rapido y con mas fuerza

Mi respiracion se agitaba y mis mejillas estaban sonrojadas, cuando aumento la fuerza, gemi su nombre, casi era un grito, pero es que no podria soportar demasiado, mi sexo se humedecia mas y mas, pero se estrechaba, anunciando mi orgasmo.

Gruñí entre dientes, quería estrecharla contra mi, pero al mismo tiempo no quería soltar sus manos. Hundí la cabeza en su cuello, a punto de llegar a las estrellas

- REMUS! - grite su nombre y cerre los ojos, cuando senti mi cuerpo estremecerse y mi sexo estrecharse, llegue en ese instante, ese orgasmo, me rodeaba haciendome sentir en las nubes

Solté otro gemido ahogado, mordiendo sin poder evitar su hombro y dando erráticos empujones mas, antes de por fin liberarme dentro de ella, gimiendo entrecortadamente su nombre y viendo entrellitas por todos lados

Me mordi el labio, gimiendo de placer al sentirlo derramarse de nuevo en mi interior - te amo - dije ahi en sus brazos

Respiré agitadamente sobre ella, acerqué mis labios a los suyos y los rocé

-Yo también te amo...-susurré entrecortadamente, dando besitos cortos

Acaricie sus espalda despacio mimandolo esperando que mis espasmos y los de el desaparezcan, deje que dejara besitos en mis labios, mientras rozaba mi nariz con la suya.

Sonreí, agitado. Le dejé un último beso en sus labios mientras salía de ella con cuidado. Solté con delicadeza sus manos, empuñando las cadenas y, con un suspiro de placer me acomodé a su lado, abrazandola posesivamente por la cintura